Felices Pascuas de Resurrección

Felices Pascuas de Resurrección

martes, 22 de febrero de 2011

A los 25 años del espíritu de Asís


Desde el 27 de octubre de 1986, se celebra “El Espíritu de Asís”, que no es otra cosa que una celebración con la que se impulsa el Encuentro Interreligioso, y su principal finalidad es la búsqueda de la paz, de la armonía.

Fue inaugurado por el Papa Juan Pablo II, hace 25 años, en el Encuentro Interreligioso celebrado en la ciudad de Asís. Se reunieron 150 representantes de las doce principales religiones del mundo para rezar, ayunar y dialogar, buscando propuestas para recorrer caminos de encuentro, de diálogo y amistad, en primer lugar, con cristianos de diversas denominaciones y luego con todos los creyentes en Dios. Podemos decir que fue un soplo del Espíritu Santo para lograr armonía y paz en el mundo inspirado en el Hermano Francisco.

Desde aquel 27 de octubre, el Espíritu de Asís, sigue difundiéndose por el mundo, oponiéndose rotundamente al espíritu de violencia y al abuso de la religión como pretexto para la violencia, ya que desde la fidelidad a la propia convicción religiosa, y sobre todo a Cristo, no se expresa con la violencia, la intolerancia… sino con el respeto al otro, el diálogo, la paz y la reconciliación.

domingo, 20 de febrero de 2011

DOMINGO 07 DEL TIEMPO ORDINARIO

REFLEXIÓN BIBLICA DOMINICAL Oscar Montero SDB

DOMINGO 07 DEL TIEMPO ORDINARIO

Año A 2010 – 2011

Lv 19, 1-2.17-18; 1Cor 3, 16-18; Mt 5, 38-48.

“La locura de amar como Jesús:

el secreto de la santidad cristiana”.

El cristianismo es de gente loca, como lo afirma San Pablo en la segunda lectura de hoy: “Si alguno de ustedes se cree sabio en este mundo, que se haga necio” (1Cor 3, 18). (La palabra griega morós se tradujo por necio, pero literalmente significa loco)”. Y es que el mensaje de Jesús no se entiende fuera de lo más ilógico del mundo: la muerte de Dios en la cruz. Si no, ¿cómo perdonar al padre que viola a su bebé? ¿Cómo pedirle a una familia que perdonen al guerrillero o al paramilitar que secuestró y asesinó brutalmente a su hijo? ¿Cómo decirle al indefenso que perdone a quien le robó sus pocas pertenencias en acto abusivo de injusticia? Para cumplir todo esto, ciertamente, se necesita estar muy enfermo; pero enfermo de una locura que se llama Cristo, Evangelio, cruz.

“Ustedes han oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente. Pero yo les digo no hagan frente al que les hace mal…” (Mt 5, 38-39). La famosa Ley del Talión, que se practicaba en el Antiguo Testamento, no era una forma de venganza. Antes bien, era una manera de controlarla y de poner en práctica un sistema de justicia conmutativa (de individuo a individuo) y reparativa. Si me robaste 100, me tienes que devolver 100; si me afectaste en 20; me tienes que reparar en 20. Rompiendo los esquemas mentales y la lógica de su sociedad –y la de la nuestra, ¿por qué no?- Jesús nos invita a superar la justicia con la caridad. En moral social es común una frase tanto para la una como para la otra. “Justica es dar al otro lo suyo”. “Caridad es dar al otro de lo mío”. Jesús nos propone como ley el precepto del amor, obviamente, una vez que hayamos cumplido con dar a cada uno lo que en justicia se merece: sueldo, salud, alimentación, educación, respeto, etc.

No nos engañemos, en verdad “¡Es duro este lenguaje! ¿Quién puede escucharlo?” (Juan 6, 60). Así le dijeron a Jesús en el Evangelio un grupo de discípulos que lo abandonó. En los colegios ni en las universidades, y menos en la calle, se aprende esto. ¡La intolerancia y la violencia, la reacción impulsiva parecen dominar nuestros patrones de conducta! Tal vez, el mejor ejemplo de amor gratuito que supera la justicia conmutativa y reparativa sea el amor puro y oblativo de nuestros papás. Son ellos quienes no esperan nada a cambio: los que nos prestan sin esperar devolución; los que nos perdonan las más peores faltas; los que no sólo hacen lo que les pedimos; sino hasta demás… y sólo lo hacen por amor.

“Por tanto, sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto”. (Mt 5, 48). La santidad, nos lo recordó hoy la primera lectura, era ya voluntad de Dios desde antiguo: “Serán santos, porque yo, el Señor, su Dios, soy santo” (Lv 19, 2). Y es que la santidad y perfección exigidas por la Palabra de Dios están en contextos de actos de amor: “no odiarás de corazón a tu hermano… no te vengarás ni guardarás rencor (Lv 19, 17-18). Nuestro catolicismo tal vez nos insistió en que los milagros y las oraciones constituían la santidad. Jesús nos lo aclaró hoy: la perfección, la santidad tiene como esencia el amor. ¡Fuera de la locura del amor, de ese amor clavado en cruz, no hay otra santidad!

martes, 15 de febrero de 2011

CORO FILARMÓNICO DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL PRESENTÓ CONCIERTO EN LA PARROQUIA SANTISIMO SACRAMENTO

Continuando con los actos celebratorios de las “Bodas de Oro” de la Parroquia, el coro Filarmónico de la Universidad Nacional de Piura, dirigido por el profesor Raúl Ramos García, hizo su presentación de gala en el auditorio San Marcos de la Parroquia Santísimo Sacramento, el domingo 13 de febrero a las 8 de la noche en un concierto extraordinario, en la que presentaron los mejores piezas musicales de su vasto repertorio.

Un auditorio talmente lleno, con un público alegre y entusiasta, fue el escenario para la presentación de valses, boleros, bailes colombiano, música internacional y marineras.

El espectáculo fue de primera, lleno de colorido, de música y de una alegría contagiante que hizo vibrar de alegría, no solo por la música sino por los regalos que su dinámico párroco el Padre José Guillermo Uhen, hizo a los presente en víspera de la celebración del día del amor y la amistad, el día de San Valentín. Los agraciados fueron los esposos, los amigos, y hasta las viudas.

Al final de la noche el público salió muy contento de haber participado de una velada sencillamente extraordinaria.